El próximo domingo, día 29 de noviembre, comienza el Tiempo de Adviento.
Es un tiempo para preparar la llegada del Señor, para prepararnos a recibir al Señor.
La Iglesia nos recuerda en este tiempo que debemos estar atentos a todas las llegadas que el Señor hace a nuestras vidas, no sólo en Navidad; también al final de la vida de cada uno y al final de los tiempos.
Por eso, el Adviento es tiempo de preparación y esperanza. El Adviento es también, por tanto, tiempo de enderezar los caminos de nuestra vida, de volvernos hacia ese Dios que viene a nosotros, de acercarnos al sacramento de la Penitencia para tener el alma bien dispuesta.